Los fragmentos que desaparecen de mi memoria
se almacenan dentro de mi corazón,
atorados con cuidado así que nunca estarán rotos
Te deslizaste a través de mis yemas de los dedos
y desapareciste en el cielo de la noche, nunca miraste hacia atrás
Como esas estrellas, mi corazón también se hundirá en oscuridad...
Tu voz que llama más allá de la luz,
todavía los ecos son como en ese día fueron a ti
Esta tristeza debe tener un extremo,
De alguna manera, te alcanzaré, besaré tu mejilla pálida
para decir adiós a las noches en que solamente te miraba
La voluntad nunca volverá otra vez,
incluso estos restos tan dejados
en las profundidades de mi corazón que estoy analizando…
Mi voz que grita hacia fuera de este lugar ahora
ecos encendidos sin fin.
Vago sin objetivo fijo, hasta que llegue, a alguna parte
porque ahora nuestras voces vibran y resuenan tan lejos.
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